La sostenibilidad del sector aéreo sigue en el foco de los planes de Bruselas y con ella los derechos de emisión de CO2 que traen de cabeza al sector. En este sentido, tal y como ha podido saber elEconomista.es, desde la Unión Europea trabajan en una propuesta que vincula la gratituidad de estos derechos al uso del combustible de aviación sostenible, conocido como SAF, que a día de hoy tiene todavía una cuota de mercado mínima. Se trata de una fórmula para impulsar el uso de este insumo que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 50% y un 60% con respecto al queroseno tradicional al tiempo que se produciría una relajación en las tensiones de los balances de las compañías del sector tras los daños de la pandemia.
Cabe recordar que, según la legislación actual, las aerolíneas tienen derecho a un porcentaje de derechos de emisión de CO2 -ETS- gratuito de forma proporcional a su actividad en el año 2010, cuando se adoptó esta medida. En cambio, este esquema va reduciendo su porcentaje de cobertura de forma paulatina y si nada lo impide, finalizará en 2024, momento en que las aerolíneas deberán hacer frente a estos créditos por el 100% de sus emisiones. En datos, el sector aéreo recibió más de 32 millones de toneladas de derechos de emisión gratuitos en 2019, lo que supone un subsidio estimado en 810 millones de euros al precio de aquel entonces, que era aproximadamente tres veces menos que en este momento, por lo que su no adopción implicaría un sobrecoste de miles de millones de euros anualmente.
Es por ello que la aprobación definitiva de este proyecto, que según fuentes de la UE cuenta con el respaldo de gran parte de la cámara, daría un balón de oxígeno a las compañías a medio plazo. Ahora, según señalan las mismas fuentes, debe ponerse negro sobre blanco en la letra pequeña de la propuesta, entre la que figura qué porcentaje de SAF deben utilizar para tener derecho a estas ayudas. Actualmente, la legislación obliga a cargar un 2% de este combustible sostenible en los vuelos para el año 2025, cifra que sube al 5% de cara a 2030.
Además, en las últimas semanas, el Parlamento de la UE aprobó una enmienda al programa Fit for 55 en lo que se refire al Esquema de Comercio de Emisiones de la Unión Europea (EU ETS) que ampliaría el alcance del mismo para incluir todas las salidas de vuelos desde el Espacio Económico Europeo a partir de 2024, es decir, también se aplicaría a aquellos vuelos que ya están bajo el acuerdo Corsia (esquema de reducción y compensación de carbono para la aviación internacional), algo que desde el sector califican de “preocupante”.
Fuente: https://www.eleconomista.es/transportes-turismo/noticias/11852090/07/22/Las-aerolineas-que-usen-SAF-tendran-derechos-de-CO2.html