Después de años de escrutinio sobre los aviones 737 MAX y 787 Dreamliner de Boeing, la guerra en Ucrania está demostrando ser otro golpe en el estómago para el fabricante de aviones estadounidense.
El martes, Boeing ajustó sus datos de pedidos y entregas para eliminar 141 de sus aviones de su cartera de pedidos oficial, dos tercios de los cuales se debieron a eventos geopolíticos en Ucrania, dijo Boeing a Insider. Los aviones incluyen 130 de sus 737 MAX más vendidos, ocho 777 y tres 787 Dreamliner.
Según Boeing, la decisión de la compañía se debe a las normas contables de EE. UU. que exigen que las ventas dudosas se eliminen del libro de pedidos en firme si existe incertidumbre o riesgo en las circunstancias financieras del comprador.
En este caso, las sanciones internacionales contra Rusia han obligado al fabricante de aviones a dejar esos aviones en el limbo porque la probabilidad de que se entreguen es baja, explicó Boeing a Insider.
Sin embargo, la compañía dijo que los contratos subyacentes permanecen y una vez que se alivian los riesgos, los aviones pueden volver a la cartera de pedidos.